¿Qué pasa en la U de A?

Abstract

RESUMEN: "Entre las directivas de la U. de A. y los representantes del estudiantado se suscribió un Acta de Compromiso para facilitar el retorno a clases y la normalización académica, se levanta la asamblea permanente luego de 5 semanas. La noticia relata así: “En el máximo centro educativo de Antioquia actúan grupos ideológicos de apoyo a los movimientos armados. “Ellos obedecen órdenes externas y mantienen dentro del campus universitarios sus células de trabajo en una militancia clandestina”, explica un funcionario. Los estudiantes de los primeros semestres admiten que son invitados -más no presionados- a formar parte de estas plataformas y que quienes se unen lo hacen libremente y por convicción (...) Los adeptos a los movimientos extremistas reciben unas tareas y ascienden en cada organización de acuerdo con su capacidad de liderazgo y de acción. Por temor a represalias, su labor se cumple en forma velada y a la hora de efectuar una protesta algunos cubren los rostros con una prenda de vestir o pasamontañas. La Universidad en ningún caso aplica criterios excluyentes para el ingreso de estudiantes, ni califica el interés político de nadie. La apertura ideológica es un principio básico, aunque los efectos sean las parálisis académicas temporales y los daños físicos contra la institución, por encima de los llamados a la paz, la convivencia y la tolerancia que hacen las directivas”, señala un docente de Derecho”. En relación a los grupos armados afirma que: “Es un secreto a voces que hay adeptos de las Farc, del ELN, del EPL y aún del Bateman Cayón. Entre ellos existen discrepancias y enfrentamientos verbales, sobre todo en las asambleas estudiantiles (...) También hay seguidores de las Autodefensas (...) Los líderes más radicales llegan incluso armados a disolver clases y exigen una universidad gratuita en todos sus aspectos: académicos, de asistencia social y de extensión”. El Consejo Académico afirma que: “Las autoridades de la Universidad realizan esfuerzos para que se continúe con la política de diálogos y de acuerdos, con miras a resolver las diferencias que puedan existir en el tratamiento de los conflictos, y luchas con insistencia para que el claustro permanezca abierto y no se lo convierta en objeto de actividades violentas por parte de las autoridades o de los grupos de la comunidad universitaria ni de personas ajenas a la institución”. Mientras tanto, el rector Jaime Restrepo afirma que “carecen de fundamento las presiones de quienes insisten en entorpecer el reinicio de las actividades académicas. “Nos hemos propuesto defender la vigencia de la universidad pública. Hoy nos consideran modelo administrativo, financiero, docente y de investigación, y a la par actuamos solidariamente con la comunidad (...) La mano dura y la represión no forman parte de nuestro estilo. Hemos sido abiertos al diálogo. Cuando nos convencen de que las propuestas que plantean profesores, trabajadores o estudiantes buscan mejorar, no vacilamos en aceptarlas”. Se recuenta como las consignas políticas (en relación a las pintas) abundan en casi todos los bloques de la U. de A.

CONTEXTO DE LA NOTICIA: El Gobierno Nacional responde ante la polémica que ha significado la renuncia del Ministro de Defensa Rodrigo Lloreda Caicedo, por prolongar por tiempo indefinido el despeje en la zona del Caguán. El país se debate ante la posibilidad de un golpe de Estado. Pero, se dice que los militares rodean en apoyo al presidente; esto, a pesar de la renuncia de 17 generales en solidaridad con la protesta del Ministro de Defensa.