La tiranía del medio ambiente

Abstract

En este ensayo Sanín Cano habla de Charles Grant Allen como uno de esos hombres que, aunque no figura en la lista de los grandes hombres de la historia, en él confluyen buenas y malas cualidades de una raza, es de esos fieles testimonio de la historia de los pueblos. Fue un hombre con espíritu inquieto, apegado a la verdad la cual defendía asiduamente, creyente férreo de la realidad del mundo visible ya que era una forma de desarrollar un país vigorosamente. Los personajes de sus novelas obedecen a una línea recta, pues su carácter no se complace en los contornos indecisos; es admirado desde señoras que leen sus novelas por pasar el tiempo hasta lectores aficionados. Las críticas hechas a Grant Allen son porque el autor ha tocado múltiples temas y se cree que quien hace eso no profundiza en ninguno, sin embargo Sanín Cano parece defenderlo porque el novelista no tiene prevenciones para estar en contra de quienes “adoran lo establecido sólo porque la mayoría lo consciente”. Sanín Cano continúa elogiando a Gran Allent por su espíritu combativo, reformador e irónico que a tantos atormentaba y aunque puede ser catalogado de pesimista, no lo es, pues, no considera el sufrimiento como una condición incorregible del ser humano y si bien ve desgracias, injusticias y demás, cree en el buen sentido del hombre. También ve en Allent un escritor sencillo donde se agita el pensamiento moderno sin que ello lo haga menor y compara su observación y escritura con Zola. Según Sanín Cano la labor de Grant Allent es avisar “la soberana libertad de los instintos” que han sido aplacados por una sociedad organizada, la cultura cristiana.