Antes del último sueño

Abstract

""Antes del Último Sueño"": ""El diario de una agonía, ¿vale la pena de llevarse? Mientras hay rosas en la magnificencia oculta en los jardines interiores, reguémosla al paso de los hombres;¿ que su esplendor y, su perfume sirvan para embellecer el miraje furtivo de la vida. Un pensador, no debe dar al mundo, sino una parte de su florecimiento¿ su vida, es suya; un lago en la soledad¿ taciturno, monótono, sombrío¿ ¿qué importa al mundo las tormentas de ese lago? Solo es cielo que está sobre él, ve sus tempestades;¿ y, acaso algún cisne solitario que no ha temido aventurarse en sus tormentas¿ El alma de un pensador, es un rosal florecido en el silencio."" (Ibíd., Pág. 9) Este libro esta hecho con fragmentos del pensamiento de Vargas, toda la filosofía, sus ideas de los hombres, el alto sentido filosófico que poseyó de la vida están registrados en este libro que él mismo ha llamado una especie de diario personal en la entrada al ocaso de su vida, cuando escribía la presentación de este libro, estaba cumpliendo cincuenta años. Escribió ""cincuenta años, que pesan sobre mi vida como cincuenta siglos; ¿por qué he vivido tanto? ¿para qué? ¿Qué ha sido de mi vida? Un grito en la tempestad¿y, si ese grito ha logrado conmover muchas almas, no logra ya, conmover la mía, soy sordo a los ecos de mi propia vida, ciego al resplandor de mis visiones¿ continuo en clamar y no me digo"" (Ibíd., Pág. 12.) Es inmensa su palabra, logra la perfección y la armonía de las ramas de los árboles con el viento del verano, su certeza de la debilidad humana, de la torpeza y del fracaso como especie, son miradas de un visionario, de un profeta, todo lo que dice, solo le viene del dolor de haberlo vivido y de haberlo confirmado con la vida. ""Alto como bandera fue mi nombre; izado fue, sobre los dolores y, las esclavitudes de los hombres¿ alzado hacía el huracán; ¿por qué gemir al huracán que lo azota?... pronto será un harapo, que la tempestad llevará al olvido¿ bendita sea la tempestad, que me traerá el silencio en los rígidos pliegues del olvido¿"" (Ibíd., Pág. 13) Todo esto no fueron más que palabras, hay libros hace ya un siglo y su palabra sigue intacta en el tiempo, la tempestad ha cambiado de rumbo, nos golpea de manera más torpe, nos hace mas bullosos en el bullicio de la vida, todo se convirtió en un mercado de San Alejo, quién da más, es la consigna, ya no hay escritores, que su palabra sea una bandera en busca de de ondearse frente a los grandes y simples ideales humanos. Somos una raza imperfecta, absolutamente triste y en busca de una salida para todos, se visionan las guerras, se dan, mueren miles y otros miles seguimos en pie y seguimos siendo una raza triste, una raza que se pudre por dentro, la lepra social es interna, entonces es mas difícil crear lepraderos sociales donde morir bajo el mismo dolor, el mundo en sí ya lo es, no hay nada que lamentar bajo el cielo, hasta dios ha huido espantado de la mirada de los hombre. ""La amargura de ser desconocido por mis contemporáneo, no me la reservo el destino; pero, ¿no es una mayor amargura, esta de ser Incomprendido? ¿qué vale la gloria de nuestro nombre, sin el triunfo de nuestro pensamiento? La obscuridad, sería preferible a esta celebridad; y, el No ser a Ser así."" (Ibíd., Pág. 20) Un hombre solitario tiene todas las virtudes humanas, porque cuanto nos cuesta una sola nota de silencio en la inmundicia de la vida social, nos tenemos que soportar con todos los defectos y por defecto soportar a nuestros semejantes, pero la vida también es esto y también afortunadamente, también es la muerte, se escribe un poco por la necesidad de alargar el silencio postrero. ""de todas mis obras, la única de la cual me enorgullezco, que nadie ha leído y, que todos han calumniado: mi vida, y mis libros son apenas el reflejo de mi vida; y siempre la llama, es más bella que el reflejo"" (Ibíd., Pág. 25). Este libro es un canto a la soledad de un hombre que amó la humanidad con una humildad que lo desesperaba así mismo, porque sabía que el hombre bajo el cielo no tiene redención, sabía del dolor que traerían los tiempos después del suyo y no se equivoco mucho, el hombre es un aliento eterno ante los ojos de un Dios que ha desaparecido de la conciencia de la tierra y del corazón de los hombres.