Misterios de la vida

Abstract

La reedición de este libro inicia con el apartado ""Palabras preliminares"" por Hugo Bolívar Hinojosa, en el cual, aclara que La Unidad Central del Valle del Cauca (UCEVA) busca recuperar del olvido una obra que fue la primera novela colombiana escrita por una mujer. Antes de dar inicio a la narración, la autora Mercedes Gómez adjunta al libro una nota dirigida al señor Luciano Rivera y Garrido, donde le manifiesta su admiración por su ilustre intelectualidad y, por lo tanto, le dedica esta producción. El señor Rivera y Garrido por su parte bajo el título ""A los lectores"" (1888) le expresa la gratitud a la autora y justifica que las equivocaciones que hay en el libro no lo hacen menos meritorio, ya que, éste versa, en particular, en el ""entretenimiento y sensibilidad"" de la escritora y en una historia que ella misma vivió, a si que, el valor de la obra radica en la originalidad del argumento y la función moralizadora del mismo. A su vez, la autora también le encomienda este libro a la valoración del señor Eustaquio Palacios, quien le sugiere que a pesar de este buen logro, para una próxima publicación trate sobre temas más ""simpáticos"", ya que, la gravísima falta que ella exhibe en su libro puede servir de fundamento para que otras mujeres incurran en lo mismo. La historia se desarrolla a lo largo de XXI capítulos cortos, cada uno subtitulado según el tema que se aborda, todos están interrelacionados y relatan la historia de los infortunios de los hijos huérfanos que son abandonados por sus padres, sin embargo, el amor les ayuda a superar todas las vicisitudes. El lenguaje utilizado por la escritora es sencillo, se configura un narrador en tercera persona y hay desarrollo en las acciones que ejercen los personajes; además, es muy recurrente el diálogo durante toda la historia, en el cual, se exhiben reflexiones concernientes a los vicios y las virtudes. Puede decirse que, al igual que apunta Hugo Bolívar, el libro se inscribe dentro de ""un código de conducta moral"".