Sonatina para dos tambores

Abstract

El cuento que a continuación se reseñará se halla contenido en el libro Un siglo de erotismo en el cuento colombiano de Oscar Castro García. Este cuento cuenta la historia de desamor y de hastío entre Damiana y Santiago, un matrimonio de negros que viven en Santa Bárbara del Rayo. La mujer está gravemente enferma de los pulmones desde hace tres años, su marido durante todo este tiempo la ha acompañado y ayudado fielmente: ""la mujer le dolía el aire y lo cogía por la nariz, para que le saliera otra vez por los fuelles con un sonido de ""conuno"" retemplado"" (69). Después de tanto aguantar, Santiago, que es un negro ""calentón"" le llega el momento de la desesperación y las ansias, quería seguir con una vida normal, una vida en donde pudiera salir a la calle tranquilo, sin temor a dejar sola a Damiana con su enfermedad; constantemente sentía este dolor en el alma y en el cuerpo, pues desde hacía mucho tiempo ya no compartía el lecho con su Damiana, que en el tiempo pasado era negra alentada: ""la Damiana era toda una hembra, antes de que empezara a convertirse sólo en ojos y tiras de piel que colgaban"" (74). Guillermina, otra negra como la que fue Damiana, aparece en la vida de Santiago para hacerla cada vez más imposible de llevar en paz, pues el deseo por poseer a esta mujer, lo enloquece, lo enceguece, lo mortifica y lo hace pensar mil barbaridades con respecto a la existencia de Damiana, pues ésta se le va convirtiendo en un estorbo, en un impedimento para que Santiago disfrute al lado de Guillermina, finalmente desea la muerte de Damiana, no la hace efectiva, pero los tambores que afuera suenan y la voz de la negra que canta alegremente, lo llaman y él como metido en un sueño del cual no quiere despertar, marcha al ritmo de los tambores hasta donde Guillermina está, mientras tanto a Damiana le falta el aire en su nariz y sola en la habitación, lentamente muere. Oscar Castro García en su antología cita a Eduardo Pachón Padilla, éste clasifica a este autor dentro de lo que llama corriente de realismo social, por tratar temas del proletariado urbano y rural. Dice: ""La atmosfera escogida trasciende en un medio reverberado por el acosamiento de la estuosidad, el sexo y la miseria"" (67).