La taberna de Auerbach

Abstract

Rafael Humberto Moreno-Durán (Tunja 1945- Bogotá 2005) novelista, cuentista y ensayista colombiano. Estudió Derecho y Ciencias Políticas en la Universidad Nacional de Colombia. Colaboró en publicaciones americanas y europeas, entre ellas los diarios El País de Madrid y La Vanguardia de Barcelona. Director de la edición hispanoamericana de la revista Quimera. Entre sus obras se destaca la trilogía de novelas Femina Suite, compuesta por Juego de Damas, El Toque de Diana y Finale Capriccioso con Madonna. Los felinos del canciller, El Caballero de la Invicta, Mambrú y El festín de los conjurados, son otras de sus novelas. Es también autor de los volúmenes de cuentos Metropolitanas, Cartas en el Asunto y El humor de la melancolía. Cuenta además con un ensayo imprescindible para la literatura latinoamericana, De la barbarie a la imaginación, y de un libro definitivo sobre la literatura alemana, Taberna in fabula cuyo primer ensayo es La Taberna de Auerbach. En La Taberna de Auerbach, Moreno-Durán expone en efecto, sus concepciones sobre la literatura alemana desde Goethe hasta la postguerra. De hecho, la taberna de Auerbach, es el escenario a partir del cual analiza la condición social e intelectual de este país. Esa taberna es la metáfora del libro en el que se concentra la leyenda del Doctor Fausto y posteriormente la presencia de Goethe, Schiller, Nietzcshe, Kafka, Brech, Heckel, Dôblin, Klee, Trakl, Kirchner, Schmidt-Rottluff, Grosz, y otros cuya obra pictórica o literaria refleja la grandeza y la miseria de un centro artístico convertido luego en el campo de concentración de Buchenwald, ubicado en Weimar, ciudad donde Alemania se declara república en 1918, ciudad de gran eclosión cultural y, paradójicamente, de la barbarie estatal en la que se sumió el país con el régimen nazi. La Taberna de Auerbach es, pues, un ensayo sobre la paradoja de una Alemania escindida. Una tierra que ha dado para la literatura universal obras como el Fausto o el Zaratustra, pero también ha legado para la memoria de la humanidad los trágicos episodios del Holocausto y los campos de concentración. Funestos acontecimientos históricos que ya prefiguraban los artistas alemanes fundadores del expresionismo concretado en los movimientos que recibieron el nombre de El Puente y el Jinete Azul. Este movimiento artístico asume una denuncia social, un compromiso político crítico del orden marcial del Káiser reflejado en los tópicos de su arte: la taberna, el burdel, la prostituta, el gánster, el mendigo. Contrapartida satírica del orden burgués, rebelión contra el realismo objetivo a favor de una recuperación de la capacidad simbólica del arte y de la expresión del ser del artista en la clandestinidad que le permitía la taberna y el Kabarett, aun cuando les costara el exilio, la censura o la vida misma. En La Taberna de Auerbach, Moreno Durán, con un gran conocimiento de la literatura y la cultura alemana, piensa un devenir que según él, nos es contemporáneo, esto es, que se levanta a la máxima espiritualidad para descender a la barbarie más abyecta.