Señor que no conoce la luna

Abstract

La novela puede considerarse como un sueño convertido en pesadilla en donde los humanos se dividen en dos: los vestidos y los desnudos. Es un mundo en donde cada uno tiene su lugar. Los vestidos tienen sus casas, sus calles, viven en una sociedad organizada, con sus reglas, son ellos los que tienen el poder. Los desnudos, en cambio, viven en un espacio de laberintos, hacinados en lugares malolientes. Los desnudos siempre buscan la aprobación de los vestidos, sin embargo, son utilizados para satisfacer los placeres carnales, incluso son llevados a la tortura como forma máxima de placer y regocijo. Los desnudos son descritos de forma más detallada. El protagonista de la novela es uno de ellos. Cuenta como la característica física principal de sus congéneres es que tienen los dos sexos, y cada adolescente que llega a cierta edad puede decidir si ser más hombre que mujer o más mujer que hombre. Son seres que no tienen autoridad sobre sí mismos, ni la determinación necesaria para unirse y enfrentar a los vestidos. Practican la antropofagia, cada vez que un vestido llega a su lugar de residencia, le ofrecen los más exquisitos platos, todos hechos de la carne de uno de los desnudos. La obra, dividida en fragmentos narrativos sin numeración ni título, es según el crítico literario Álvaro Pineda Botero (2005) ""un catálogo de mitos negativos, podríamos decir, los más oscuros del inconsciente colectivo de la civilización occidental: No solo la antropofagia y la androginia, sino también el infierno, el masoquismo y el envilecimiento"".