Reflexiones y prospectos sobre la novela

Abstract

Reflexiones y prospectos sobre la novela, es una conferencia dictada en París por el escritor, ensayista, diplomático e historiador colombiano Eduardo Caballero Calderón, en el año de 1963. En un estilo coloquial y atractivo, se desenvuelve la idea nuclear del texto, esto es, la averiguación por lo qué es la novela y en qué consiste lo novelesco.

En principio, pues, Eduardo Caballero Calderón marca una diferencia entre el teatro y la novela, como auténticos géneros intraducibles a otros géneros, con leyes especiales y elementos permanentes e inmortales más allá de toda caducidad. Estos operan en un ámbito imaginario y fantástico. Así, define a la novela como un monólogo interior, una proyección del hombre desde adentro y no desde afuera como sí lo hace el cine. Monólogo no sólo privativo del género literario sino también de la especie humana que es soledad individual, perplejidad interior intransferible y angustia ante lo que no es. La conciencia de esta soledad, perplejidad y angustia llevan al hombre a buscar el diálogo con otros seres o, al menos, la enajenación. Así el lector de novelas busca en ellas un interlocutor, una solución a su soledad, un sujeto para el diálogo, es decir, el intercambio de monólogos. ""Toda la vida, pues, es un monólogo"", dice Caballero. Sin embargo, al situar históricamente la novela, se descubre en el ámbito hispanoamericano un atraso, puesto que la novela se debe a un fenómeno urbanístico y burgués. Y a este respecto, dadas las razones históricas de la Conquista, la Colonia y la Independencia, Suramérica ha ido lenta, embrolladamente. En este continente la aparición de la ciudad es un fenómeno tardío. Mientras en el siglo XIX en Europa y Estados Unidos ya la novela narraba el drama o conflicto interior y social del hombre consigo mismo. En nuestras latitudes seguíamos teniendo por personajes al paisaje, al hombre en pugna con su medio.

La conferencia o ensayo finaliza diferenciado entre novela analítica y novela sintética, según la extensión, método y concepción del tiempo literario y vital que tengan al momento de reflejar ""la realidad de una situación y la intimidad del personaje"". Se cierra, pues, con una invitación y un consejo de acercarse a la creación literaria, su misterio y solitaria intimidad. Más importante, como testimonio de la soledad eterna del hombre o novelista, que quiere acompañar o compartir su soledad con la soledad del lector. Vale es lo que está adentro, entonces, y no afuera, como la política, la radio, la televisión, las noticias, la actualidad y los facilismos.

Eduardo Caballero Calderón, (Bogotá 1910-1993) escribió en El Tiempo y El Espectador. Algunas de sus obras publicadas son, entre otras: El Cristo de espaldas, Siervo sin tierra, La penúltima hora, Manuel Pacho, Caín, El buen salvaje, ¿Por qué mato el zapatero?, Historia de dos Hermanos, Tipacoque, El arte de vivir sin soñar, Latinoamérica, un mundo por hacer, Suramérica, tierra del hombre, Americanos y Europeos, Breviario del Quijote, Historia privada de los colombianos, Los campesinos, Hablamientos y pensadurías y Azote de sapo.