Reloj de aire

Abstract

Luis Ignacio Muñoz nació en Zipaquirá en el decenio de los sesenta. Es escritor de narrativa y poesía. Participó en los talleres de literatura de la Universidad de los Andes, 1990, 1991, 1995, dirigidos por Manuel Hernández; en la escuela de poesía de Medellín 2003, 2004 y 2005, Diplomado en creación narrativa en la Universidad Central 2006. En el 2002 fundó el taller letras Itinerantes y desde entonces dicta en la escuela de formación artística de literatura en Zipaquirá. Realizador del programa radial Hora Literaria, en Cogua y es colaborador actual en Letras Itinerantes, en Catedral estéreo. Ha sido miembro del consejo departamental de cultura. Ha publicado cuentos y poemas en las revistas Maguaré de la Universidad Nacional, 1992, Revista trans-fugas, 1998, 1999, Revistas Mora, República del Salvador, 2000, en las antologías Otras palabras, 2003 y segunda visión de autores cundinamarqueses, 2005.

Luis Ignacio Muñoz en su antología ""Reloj de aire"", trabaja varios temas relacionados con la angustia por el paso del tiempo. Para ello utiliza como recurso del ""yo"" poético algunas metáforas con la naturaleza y con algunos personajes de pueblos en los cuales el trascurrir del tiempo es una condición humana contra la cual no se puede luchar.

En sus poemas el silencio y la quietud son tópicos que atraviesan gran parte de la antología y se contraponen con la conciencia de la voz poética de pertenecer a un mundo circundante en donde se recuerda con nostalgia un pasado mejor. Con respecto al desasosiego de la voz poética el único recurso posible para no dejarse abatir por la angustia del paso del tiempo es el acto de vivir cada instante con plenitud. Razón por la cual el ""carpe diem"" se alcanza de manera casi total en los momentos de escritura; en este plano la labor del poeta se convierte entonces en una forma de redención ante la imposibilidad de luchar contra el tiempo.

En algunos de sus poemas, se hace referencia a los años de infancia, en los cuales la conciencia de lo efímero no estaba presente como en la mente de un adulto.

En la última parte de la antología, el autor hace un homenaje a algunos escritores canónicos como Kafka, García Márquez, Silva y Rulfo, logrando una intertextualidad por medio de historias acerca de la obra de éstos, con lo cual apela a un imaginario literario colectivo.