Imagen responsive

Por favor, use este identificador para citar o enlazar este ítem: http://biblioteca.udea.edu.co:8080/leo/handle/123456789/2762
Título : Biografía de Héctor Rojas Herazo
Palabras clave : Biografías;Autores de Sucre;Literaturas de Sucre;Literatura del siglo XX
metadata.dc.description.notes: Análisis y sistematización de información: Diego Leandro Garzón Agudelo, estudiante de estudiante de la Licenciatura en Humanidades - Lengua castellana en formación investigativa.Proyecto: Los géneros literarios: catalizadores de la dinámica interna literaria (2008-2009)Investigadores principales: Edwin Carvajal Córdoba, Gustavo Bedoya SánchezInstitución: Universidad de Antioquia: Facultad de Comunicaciones, Grupo de investigación Colombia: tradiciones de la palabra
Resumen : Novelista, poeta, periodista y pintor nacido en Tolú (Sucre) en 1921. Su infancia en ese contexto quedó retratada en muchas de sus crónicas. En 1948 inicia su carrera como periodista en El Universal de Cartagena y El Heraldo de Barranquilla donde sostuvo por casi dos años la columna Telón de fondo en la que abordaba temas de literatura, arte y cultura contemporánea. Puede decirse que fue en este periódico donde Rojas Herazo inició una nueva manera de hacer periodismo en el país, más cercana al periodismo literario, que estaba determinada por diversos factores contextuales. La mitad del siglo XX coincide con uno de los momentos más álgidos del sangriento conflicto político en Colombia; es la época de la estigmatización política bipartidista que influyó en gran medida el trabajo de la prensa. A ello debe agregarse la disputa ideológica, producto de la segunda guerra mundial y otros factores del orden de la cultura como la expansión del existencialismo y la lectura que América hizo de él, el legado de intelectuales como Sanín Cano, Haya de la Torre, Alfonso Reyes y José Carlos Mariátegui, la reafirmación de America como tema de los creadores artísticos, el replanteamiento de las nociones de arte y cultura y el auge del movimiento piedracielista en el país. Este es el contexto de la obra periodística literaria de Héctor Rojas Herazo. En 1952 publica el libro de poemas Rostro en la soledad. Al año siguiente se publica Tránsito de Caín (1953). Hasta 1955 publicó sus artículos en el Diario de Colombia, de Bogotá e hizo colaboraciones destacadas en las Lecturas dominicales de El Tiempo, en las que con talento poético y experimentación formal se dedicó a la exploración del alma caribeña. En 1956 aparece Desde la luz preguntan por nosotros, al que le sigue otro libro de poemas titulado Agresión de las formas contra el ángel (1961). La novela Respirando el verano aparece en 1962. En 1967 ganó el Concurso Nacional de Novela Esso con su obra En noviembre llega el arzobispo (1966). Luego de publicar Señales y garabatos del habitante (1976), recibió en 1977 el título de Doctor Honoris Causa de la Universidad de Cartagena. En 1985 publica Celia se pudre, novela a la que le sigue El adolescente (1990) y una Antología de 1993. Las úlceras de Adán se publica en 1995. En 1998 la Universidad de Antioquia le otorgó la Orden al Mérito Universitario Francisco Antonio Zea Categoría Oro por haber ""contribuido de manera decisiva al engrandecimiento del patrimonio cultural de nuestro país y de Latinoamérica, con sus valiosos aportes como novelista, poeta, pintor y periodista"". En ese mismo año recibió la Cruz de Boyacá y en 1999 el Premio Nacional de Poesía José Asunción Silva. La Universidad Santo Tomás de Aquino le otorgó la Medalla al Mérito de una Vida Ejemplar con motivo de su IV Centenario en 2000. El maestro Rojas Herazo vivió en España y otras capitales de Europa durante diez años. Como pintor realizó más de sesenta exposiciones en Colombia y en el exterior (España, Alemania, Estados Unidos, Canadá). Su pintura es decididamente americana dentro del estilo figurativo, pues creó una mitografía personalísima compuesta por gallos, vendedoras, tamboreros, gaiteros, entre otros, que ya empieza a ser entendida y admirada. Luego de su muerte en 2002, El Fondo Editorial de la Universidad EAFIT publica su obra periodística en dos volúmenes titulados Vigilia de las lámparas y La magnitud de la ofrenda, Rojas Herazo por él mismo: ""A uno la literatura le comienza, como toda enfermedad que se respete, por contagio. Yo no era muy buen lector cuando me comenzó la desazón de comunicarme a través de la palabra, la cosa empezó por la gana de la aventura, seguramente Salgari. Empecé a enamorarme de la aventura narrada. En casa teníamos un gran libro que se llamaba Las veladas de la quinta, que es uno de los libros más suscitadores que yo conozco: ahí empezó el contagio: vivía tan apasionado por lo que comenzaba a leer y no podía desprender de mí, que a veces me sentía iluminado y la lectura me obligaba a despertar. Yo leía y quería que eso mismo ocurriera en una cosa que yo escribiera, uno quiere parecerse a los narradores, Victor Hugo, Tolstoi, Dostoiewsky. Aura o las violetas, La cabaña del Tío Tom, Los miserables, La guerra y la paz, La muerte de Iván Illich. Las palmeras salvajes...en fin, el miedo había que calmarlo o había que avivarlo. Ya estaba el contagio, el estigma ya era"". Gonzalo Arango lo retrató así: ""Héctor Rojas Herazo es, a simple vista, un campeón de lucha libre; un talador de bosques; un rufián; un levantador de pesas; un bulldozer que camina; un marino mercante; un arenero de Tolú; un prometeo desencadenado; un profeta del trópico; qué sé yo...un hombre de duros oficios [...] Pero si Ud. va al fondo, descubrirá que su piel esconde el alma de un poeta puro"". En 1968 Rojas Herazo dio a conocer un autorretrato que contenía cosas como la siguiente: ""Quien le ve su andar de pesista de circo o luchador que se dirige a un gumiiasu, no sabe que toda su fisiología no pasa de ser un mueble (...) Tuvo la voz gruesa y afirmativa de los animales que viven atemorizados. Temor a todo: a cortarse cuando se afeita"" a engordar más de la cuenta; a tener que dormir alguna noche en una casa sola; al solo hecho de estar vivo; a ser arrollado por un automóvil, por la espalda, cuando va caminando por una acera. Sabemos también que, para él, un viaje en avión es mucho más catastrófico que un juicio final"".
metadata.dc.relation: http://www.lacasadeasterion.homestead.com/v1n1jeroglif.html
http://www.uninorte.edu.co/biblioteca_digital/VerAutor_Fragmento.asp?CodAutor=15
http://www.uninorte.edu.co/biblioteca_digital/index.asp
URI : http://biblioteca.udea.edu.co:8080/leo/handle/123456789/2762
Aparece en las colecciones: SILC

Ficheros en este ítem:
No hay ficheros asociados a este ítem.


Los ítems de DSpace están protegidos por copyright, con todos los derechos reservados, a menos que se indique lo contrario.