Mito de la infancia. Celia se pudre: mitos, aesthesis y logos.

Abstract

Se estudian los caracteres mítico y ontológico de Celia se pudre, la personalidad del autor y la crítica a su obra. Para la elaboración teórica se tienen en cuenta autores como Pierre Grimal, Susanne Langer, Giuseppe Zarone y Jean Zeneuve. Se asume el mito como posibilidad de conocimiento basado en la experiencia humana que no desconoce la racionalidad -el logos- sino que la complementa; y como posibilidad de alcanzar desde el individuo la cohesión social, en la medida en que el individuo exorcice el mundo que aterra, integre lo onírico y se entienda a sí mismo para proyectarse a la comunidad. En esta dirección, Celia se pudre es mito, logos, experiencia y expresión de racionalidad que ejerce dominio sobre la sensibilidad. Es el mito de la infancia, que es todo y nada; existencia y muerte. Rojas Herazo, con su literatura existencialista, pretende entender el género humano a partir de su auto-comprensión y aprendizaje de la vida. Para él son más importanes los terrenos de la muerte y la infancia que los de la racionalidad; ambos, de alguna manera irracionales. La conciencia de la muerte abre la conciencia del habitar, punto de construcción del recuerdo capaz de poseer el presente y el pasado. La casa o la ciudad son el habitar y el habitar es el ser. Un ser caótico, lleno de resignaciones y nuevos sentidos. Esto termina con el hombre mismo y acaba al hombre ella también.