Para acabar con la discordia

Abstract

Muchas fueron las disidencias con las ideas de Simón Bolívar (1783-1830) luego de haberse proclamado la independencia del poder colonial español. Este discurso, firmado en Guayaquil el 13 de septiembre de 1826, constituye un sentido mensaje a los colombianos de parte del Libertador para que tales pleitos terminen. Bolívar asume su responsabilidad en la discordia que amenaza a su patria y convoca a los ciudadanos de la gran república al cese de los ultrajes y la desunión: ""No haya más Venezuela; no haya más Cundinamarca; todos seamos colombianos; o la muerte cubrirá los desiertos que deje la anarquía"".

A pesar de ser un texto corto, ""Para acabar con la discordia"" tiene todos los elementos de una oratoria elaborada. El orador no sólo emite un mensaje a un público, sino que lo hace apelando a recursos retóricos que lo embellecen y convocan la atención del destinatario. A este propósito contribuye el aún vigente optimismo independentista que se percibe en cada expresión del discurso, actitud propia de una época llena de esperanzas e ideales.

De Bolívar son también reconocidas piezas de oratoria como el ""Discurso de Angostura"" y otros discursos que pronunció durante la campaña libertadora y en los primeros años de la Independencia. Un aspecto común en tales piezas es su fuerza emotiva para expresar la esperanza en un nuevo tiempo. ""Para acabar con la discordia"" está incluido en la Selección Samper Ortega de Literatura Colombiana, en el volumen correspondiente a la elocuencia.