Alape en Ciudad Bolívar: una mirada crítica a los imaginarios construidos alrededor del letrado transcriptor en la teoría del testimonio.

Abstract

Se elogia el trabajo etnográfico de Miguel Barnet, cuya obra Biografía de un cimarrón (1966) se constituye en fundacional de la literatura testimonial en Latinoamérica. Antecedentes, géneros y subgéneros no ficcionales provenientes de la recolección de testimonios, han llevado a que no sea claro el límite entre obras provenientes del testimonio y el testimonio como género; por esta situación para el estudio de Ciudad Bolívar: la hoguera de las ilusiones se traen conceptos de Margaret Randall, Hugo Achugar, Gustavo García, Antonio Vera León y Francisco Theodosíadis; las categorías testimonio en sí y testimonio para si de Margaret Randall y las de transcriptor letrado y de testimoniante iletrado; y desde la semiótica se acude a Genette, Kristeva y Cros. Se consideran obras testimoniales de Alape: Un día de septiembre: testimonios del paro cívico (1977); Diario de un guerrillero (1980); El Bogotazo: memorias del olvido (1983); La paz, la violencia: testigos de excepción (1985) y Ciudad Bolívar: la hoguera de las ilusiones (1995). Esta obra constituida por testimonios de habitantes de Ciudad Bolívar, reflexiones del autor y paratextos respaldan los intereses de Alape para demostrar que Ciudad Bolívar no era la zona más violenta de Bogotá, que aunque sea la más pobre, no ha sido espacio de bala y muerte. La literatura testimonial se limita a un subalterno que habla y a un letrado que transcribe, pero aquí, el compromiso del escritor permea la obra para denunciar anomalías de la comunidad testimoniada.